He extraido este artículo de la pagina web http://www.latercera.com/ para demostraros las diferentes formas de manipulacion que tiene el estados sobre el ciudadano
A propósito del “espectáculo de la política nacional”, y para
contextualizarla en un cierto ámbito de racionalidad y sentido común,
que nos permita entender los dimes y diretes de esta “industria en
declinación”; es que recurro al reconocido y siempre crítico Noam
Chomsky. El ha compilado una lista con las diez estrategias más comunes y
efectivas a las que recurren las agendas “ocultas” de los políticos ( y
otros... ) para establecer una manipulación de la población a través de
los medios de comunicación. Algunas más obvias y otras más
sofisticadas, pero aparentemente todas igual de efectivas y, desde un
cierto punto de vista, denigrantes. Incentivar la estupidez, promover el
sentimiento de culpa, fomentar la distracción, o construir
problemáticas artificiales para luego, mágicamente, resolverlas, son
sólo algunas de estas tácticas.
La estrategia de la distracción.
El elemento primordial del control social es la estrategia de la
distracción que consiste en desviar la atención del público de los
problemas importantes y de los cambios decididos por las elites
políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de
continuas distracciones y de informaciones insignificantes.
Crear problemas, después ofrecer soluciones.
Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Por
ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana,
u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el
demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la
libertad.
La estrategia de la gradualidad. Para hacer que se acepte una medida inaceptable,
basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es
de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas
(neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y
1990.Tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen
sido aplicadas de una sola vez.
La estrategia de diferir. Otra
manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla
como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el
momento, para una aplicación futura. Esto da más tiempo al público para
acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando
llegue el momento.
Dirigirse al público como niños de poca edad.
La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso,
argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas
veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura
de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar
engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante.
¿Por qué? Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad
de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella
tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también
desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o
menos de edad .
Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión.
El uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un
corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido crítico
de los individuos.
Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad.
Que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos
utilizados para su control y su esclavitud. “La calidad de la educación
dada a las clases sociales inferiores debe ser la más mediocre posible,
de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases
inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles
de alcanzar para las clases inferiores”. Estimular al público a ser
complaciente con la mediocridad. Promover al público a creer que es moda
el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…
Reforzar la autoculpabilidad.
Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia
desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus
capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el
sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que
genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su
acción. ¡Y, sin acción, no hay revolución!
Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen.
Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el
“sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano,
tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido
conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto
significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control
mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los
individuos sobre sí mismos.
Jesús Bustos Jurado 1ºB
Si efectivamente todo estaba todo dicho o mejor dicho escrito.
ResponderEliminarIncluso acá se puede reflexionar..
http://www.youtube.com/watch?v=2NfAl0k1DFk
M.Murillo